Por Carlos Concha Olivares / Foto: María Jesús Pueller (Archivo Grito)
El pasado 29 de junio, el Metro de Santiago anunciaba la paralización de sus servicios en la Línea 5, más precisamente en la estación Quinta Normal, debido a que una persona se había lanzado a las vías. Se trataba de Jorge Salvo, un joven maipucino de 27 años, quien se suicidó. Jorge fue una víctima de trauma ocular, su caso lo pudimos conocer en profundidad en la Toma Piro de noviembre 2021 (1). Jorge exigía Justicia y reparación integral, poniendo mucho énfasis en que fue una víctima de un ataque directo de un agente del Estado en un contexto de protesta social, situación que lo dejó literalmente viéndose el ojo colgando.
Para Jorge, su familia y amigos la Justicia y la anhelada reparación integral nunca llegó o, en el mejor de los escenarios, llegará demasiado tarde. Jorge dejó una hija y se convirtió en la cuarta víctima de trauma ocular que se suicida a casi cuatro años del estallido social.
Ante esta nueva tragedia, el abandono, la parsimonia política, el incumplimiento en los compromisos suscritos; organizaciones de víctimas de violaciones de Derechos Humanos de la revuelta popular, como la Agrupación de Víctimas de Violencia por parte de Agentes del Estado (AVIDVAE) y la Coordinadora de Víctimas de Perdigones, revitalizaron gestiones para instalar en la sociedad un pliego de demandas. Acciones que se están realizando en un escenario donde todo lo relacionado a los Derechos Humanos es capturada por la agenda de los 50 años del golpe de Estado. No obstante, estas organizaciones se han propuesto defender un petitorio en el corto, mediano y largo plazo.
“Esta articulación se origina después de la muerte de nuestro compañero Jorge Salvo, debido al suicidio, sucedió algo que nosotros venimos diciendo hace prácticamente 4 años, que es necesaria una reparación integral, y no solo a los sobrevivientes sino también a las propias familias. Además de eso el abandono que existe por los diferentes daños que ocurrieron durante la revuelta popular. En esta instancia estamos solamente lo que son organizaciones, porque querían conversar con organizaciones, y ese espacio estamos AVIDAE y Víctimas de Perdigones”, explicó la vocera de Víctimas de Perdigones, Camila Valdés Manquelaf.
Justicia y reparación
Estas organizaciones levantaron propuestas (2) para poder dialogar con mayor claridad con el Poder Legislativo y Ejecutivo. Destaca por sobre todo la necesidad de implementar una Comisión de Verdad que integre a todas las víctimas del estallido social, para no solo reconocer el carácter de víctima sino también la masividad y sistematicidad en las violaciones de Derechos Humanos.
«Una de las cosas urgente es la verdad. Porque creemos que si no hay verdad no hay nada más, no hay justicia, no hay reparación. Si no se reconoce que las violaciones a los derechos humanos son sistemáticas lamentablemente vamos a vivir al alero de la impunidad, del abandono como estamos hoy en día y por eso es lo que queremos que lo que hay hoy en día exista una comisión de verdad para que se esclarezca las violaciones de derechos humanos que existieron durante la revuelta popular, cuántas de ellas necesitan atenciones, cuántas de ellas, cuántas son, porque no tenemos un catastro real”, nos comentó Camila Valdés.
A su vez, en el corto plazo solicitan abrir el “Plan Pacto” a todas las víctimas y familiares de violaciones de Derechos Humanos de la revuelta popular, proponen un universo inicial de todas las personas que han presentado querellas en alguna fiscalía del país. También, demandan que el Instituto Nacional de Derechos Humanos y la Fiscalía intervengan para destrabar el pobre avances en las querellas presentadas por las personas que vieron vulnerados sus derechos humanos durante todo el estallido social. Asimismo, piden reuniones con los ministerios a cargo de garantizar la verdad, justicia y reparación.
Por otra parte, consideran que en el mediano plazo se debe modificar la denominada Ley “Naín-Retamal” (Ley 21.560); inyectar presupuesto a la Policía de Investigaciones (PDI) para aumentar las unidades de Derechos Humanos en todo el país, y fortalecer el presupuesto institucional de la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) para generar departamentos de Derechos Humanos. Por último, en el largo plazo, demandan generar un proyecto de ley que garantice la reparación integral a todas las víctimas de violaciones de Derechos Humanos por parte del Estado.
Con estas propuestas se reunieron -primeramente- con el Comité de Diputados y Diputadas del Partido Comunista de Chile, Federación Regionalista Verde Social, Acción Humanista e Independientes. Luego, sostuvieron, junto a estos/as parlamentarios/as, un encuentro con el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.
Sobre estos espacios de diálogo, la vocera de víctimas de perdigones evaluó de manera positiva estas instancias y que de momento los estaban escuchando. “Presentamos las principales problemáticas que han habido al respecto como por ejemplo la pensión de gracia que están entregando a los sobrevivientes, lo que muchos de nosotros no tenemos y también hablamos acerca de la reparación, que buscamos que la reparación se extienda, que no lleve el nombre que tiene el nombre PACTO, que solamente acoge a traumas oculares, que sean obviamente atenciones para todos los diferentes daños, como casos torturados y torturadas que no se están contemplados, casos graves, como el caso de los asesinatos, de familiares de asesinados que también necesitan atenciones, los compañeros presas y presos, algunos que todavía están detenidos y otros que están en libertad que también necesitan atenciones”, agregó.
Mesa de reparación y lenguaje
Este gobierno implementó la Mesa de Reparación Integral para las víctimas de violaciones de Derechos Humanos durante el Estallido Social, la que en su etapa de recopilación de antecedentes se encuentra cerrada, y se desconocen fechas o resultados de la misma. Para Camila Valdés esta mesa de reparación fue un fracaso. “La mesa fue bastante pobre, pensamos que iba a ser algo más serio y más concreto, como por ejemplo lo fue la Comisión Valech, donde fue mucho más serio, donde hubo más profesionales y de hecho esperábamos el encuentro con profesionales, nos encontramos con algo bastante lamentable, infantil, porque al final nos pasaron un papelógrafo para escribir lo que nosotros demandábamos. Por lo tanto, fue una experiencia bastante negativa para los sobrevivientes”, manifestó.
Además, criticó que la Mesa se hiciera por zonas y no por regiones, y que por ello muchas personas no pudieron dar su testimonio, y que de esta forma será muy difícil saber la real dimensión de las violaciones de derechos humanos durante la revuelta popular.
Por otro lado, la vocera de Víctimas de Perdigones lamenta que los discursos de los políticos no se conviertan en hechos, y espera que eso se revierta con medidas concretas no solo para las personas vulneradas del estallido social, sino también para los mapuche y las víctimas de la dictadura militar. “Estamos ad portas de cumplir los 50 años de la dictadura, y además de eso tenemos casi 4 años de que nosotros nos hemos vistos, lamentablemente, violentados por agentes del Estado. Creemos si es que vamos a conmemorar los 50 años no olvidemos también a los sobrevivientes de la revuelta popular”, expresó.
Valdés pone énfasis en otro aspecto de relevancia: La batalla del lenguaje. Explica que es necesario combatir la constante criminalización que han sufrido todas las personas que se manifestaron durante el estallido social, un ataque metódico que proviene de la derecha y la extrema derecha, en complicidad con los medios de comunicación hegemónicos, que intentan incesantemente relacionar el narcotráfico y la delincuencia con personas que salieron a protestar.
“Somos gente obrera, trabajadora que salió a luchar por las carencias que existen hasta el día de hoy. Por ejemplo, por vivienda, educación, salud. Entonces que nos criminalicen, es porque lamentablemente no se ha hecho un trabajo con referencia a la verdad y a esclarecer a que no somos criminales, no somos lumpen y eso es lo que también nosotros, en todos los espacios que podemos, somos enfáticos y lo ponemos en reiteración y ese lenguaje que existe, y además la derecha con los medios de comunicación alzan y que provoca que la sociedad nos criminalice, empecemos a trabajar en ello”, cerró Camila Valdés.
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(1) Jorge Salvo, víctima de trauma ocular (Ver vídeo)
(2) Propuestas de medidas y su temporalidad (Ver documento)
por Agencia Merkén SpA.